Cuando uno mira a una mujer embarazada le muestra consideración, quizá dándole el asiento cuando vamos en el transporte público. Por eso es raro pensar que represente un peligro. Pero en Badajoz, en España sucedió un caso insólito: una mujer embarazada asaltó una joyería usando un mando o control remoto de televisión diciendo que se trataba de una bomba.
Maite Castellano, la propietaria de la joyería, dice que aunque identificó el aparato, no se imaginó que fuera falso pues la mujer actuó con mucha tranquilidad. Pero horas antes, la mujer entró al establecimiento por primera vez, donde observó joyas como cualquier cliente, incluso se probó unos collares de oro y hasta pidió reservar varios artículos.
Como en ese momento habían varias personas en la tienda, la mujer “se vió agobiada y se fue”, señaló Maite Castellano, quien explicó que antes de irse, preguntó a que hora cerraban el negocio, lo que levantó las sospechas de Maite, que puso en alerta a sus familiares. Pero como la mujer estaba embarazada, hizo dudar a la propietaria, reporta elmundo.es.
En la segunda ocasión, la mujer entró cuando la tienda estaba vacía y no había clientes, puso el falso artefacto en el mostrador y dijo: “”Esto es una bomba, no se les ocurra moverse, no se les ocurra llamar a nadie, ni tocar la alarma, no se les ocurra hablar ni decir nada, porque cualquier vibración que hagan puede hacer estallar la bomba”.
Maite cuenta que tanto ella como su compañera se pusieron muy nerviosas, y salieron corriendo sin notar que las vibraciones de la voz no activaron la bomba. Así que la mujer robó cinco collares, cinco pulseras y tres cruces de oro por un valor aproximado de 12.000 euros y huyó. Ante el miedo de que el supuesto artefacto explosivo fuese a detonar, Maite, con la ayuda de algunos vecinos, cortó la calle impidiendo el paso a los viandantes.
Cuando la Policía Nacional llegó se dieron cuenta de que el artefacto era falso, era un control remoto de televisión con unas pilas atadas alrededor simulando una bomba.
Los vecinos la vieron subirse a un coche y se lo informaron a la policía. La mujer de nacionalidad portuguesa fue detenida en una gasolinera cerca de la frontera de Badajoz con Portugal. En el coche llevaba un cuchillo de submarinismo, un arma prohibida en España.
¿Que piensas?
Via: planetacurioso